“¿Por qué seguir peleando, incluso cuando no tengo esperanzas? Porque no he perdido aún”, Haruichi Furudate, mangaka de Haikyuu. Esta y más enseñanzas ha traído el anime a los jóvenes colombianos que han sumado estas animaciones como su fuente de entretenimiento diaria, incluso parte de su identidad.
Por Sofía Hernández Pasachoa
shernandez381@unab.edu.co
El anime es un estilo de animación tradicional japonesa que relata historias de fantasía con detalles propios de su cultura. El primer anime del que se conoce se publicó en 1917, que fue en realidad un cortometraje; actualmente este arte ha evolucionado a verse en formato películas y series de más de 30 capítulos.

¿Cómo llegó a Colombia?
Estudios japoneses con sedes en México y otros países de Latinoamérica permitieron que animes como Supercampeones y Astroboy fueran doblados al español latino y fueran transmitidos por diversas cadenas televisivas.
Esta presencia del anime en canales de origen colombiano ha permitido que la cultura japonesa tome un papel importante en el desarrollo de una rama de la propia cultura colombiana, permaneciendo en algunos casos como un eje en la identidad de estos consumidores que primero lo vieron de niños y ahora adultos lo siguen consumiendo. Si quieres enterarte de qué manera esta cultura japonesa toma parte en la cultura colombiana haz clic aquí.
Actualmente, el anime es mayormente consumido por medio de páginas web que los transmiten subtitulados. Sin embargo, algunos de los canales que los transmitían doblados en español como Canal 1, lo siguen manteniendo como una fuente de entretenimiento entre su programación, contando con actividades en relación con este tipo de animaciones para interactuar con sus espectadores.
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