Influencia de las redes sociales en la autoestima de los jóvenes

Un saludo especial a todos los oyentes de Unab radio, bienvenidos a este informe especial, acerca de la influencia de las redes sociales en la autoestima de los jóvenes. Una investigación que dará a conocer el panorama a nivel nacional y regional, sobre el uso que se le está dando a las redes sociales, acompañado de la opinión de expertos y los testimonios de jóvenes que se han visto afectados por esta problemática.

Iniciamos esta investigación dando una explicación teórica, donde se da cuenta de algunos hallazgos, referentes a la influencia negativa provocada por el consumo desmedido de las redes sociales, trayendo consecuencias sobre la salud mental, especialmente de los jóvenes.

Las redes sociales han tenido un impacto grande en la población desde su llegada. Estas se definen como un medio social donde hay un conjunto de personas que comparten, interactúan sobre cosas en común. Algunas tesis propuestas por psicólogos en este siglo han investigado, cómo afecta la adicción a las redes sociales a la autoestima de las personas y cuáles son sus consecuencias a largo plazo. Este informe se basa en las teorías planteadas en estas investigaciones y como se representa esto en nuestro entorno local. 

La investigación precursora y referente de este tema se llama “Autoestima y Relaciones Interpersonales en Sujetos Adictos a Internet” y fue realizada Ana Laura Jiménez y Vanessa Pantoja de la Escuela de Psicología Universidad Central de Venezuela, esta investigación del 2007 dejó varios hallazgos interesantes. por ejemplo, que “las personas que son adictos al internet presentan niveles más bajos de autoestima asociadas a conductas de aislamiento y sensaciones de frustración, depresión y vacío interno”. Además, que las relaciones interpersonales de los adictos al consumo del internet tienden a ser inestables, poco sólidas y llenas de dependencia de la red. 

Por otra parte, una de las primeras investigaciones que se hicieron con respecto a las redes sociales y el autoestima fue “La Adicción a Facebook Relacionada con la Baja Autoestima, la Depresión y la Falta de Habilidades Sociales” realizada por María Fernanda Herrera, María Paula Pacheco, Joaquina Palomar, Daniela Zavala, quienes afirmaron que los adictos a Facebook tienen una mayor propensión a la depresión con respecto a la gente que no lo es, además las personas adictas a esta red social no tienen buenas relaciones familiares. También se encontró que tienen problemas de ansiedad y mayor tendencia al suicidio. 

Por último están dos investigaciones llamadas “Relación entre adictos a redes sociales y autoestima en jóvenes universitarios de una universidad particular de lima”, y “Riesgo de adicción a redes sociales, autoestima y autocontrol en estudiantes de secundaria”. Se encontró una relación inversa entre los adictos a las redes sociales y la autoestima de estas personas. También se encontró que las personas jóvenes que presenten baja autoestima o algún trastorno de ansiedad son más propensas a ser adictos de las redes sociales en busca de aprobación o encajar en un grupo social. 

Teniendo en cuenta los resultados arrojados por estas investigaciones, pasamos a escuchar la opinión de los expertos, sobre cómo influyen las redes en la autopercepción de los jóvenes, y las formas sanas de consumir dichas plataformas.

Si bien es cierto, el mal uso de las redes sociales es notorio actualmente en la sociedad. El excesivo uso de estos provoca consecuencias en el ser humano que no son identificadas por la persona misma. Los riesgos más importantes de las redes sociales son, además de la adicción, el acceso a contenidos inapropiados, el ciberacoso o la vulneración de la intimidad. Para esto la psicóloga América Celeste Guevara, explica de qué manera afectan las redes sociales al autoconcepto en los jóvenes.

Por otra parte, todo en exceso se vuelve una dependencia, en este caso el uso de la tecnología puede volverse una adicción, y puede traer consecuencias desde la crianza hasta el final de la etapa juvenil.

La tecnología, además de sentirla o categorizarla a veces como una amenaza, también puede ser aprovechada de manera productiva, de modo que esta herramienta no afecte la integridad de ningún individuo.

Aunque no existe un concepto formal sobre la adicción a las redes sociales como una enfermedad, el hábito negativo de su uso excesivo se ha convertido en un problema social. La adicción es así, un comportamiento compulsivo que conduce a efectos negativos. 

Tras conocer la postura la psicóloga América Guevara, continuamos este informe especial con los datos que revelan la influencia de la social media en la población colombiana, y las afecciones en el estado de ánimo de las personas, a causa del aumento en el consumo de redes sociales durante la cuarentena.

El atractivo de Internet para los jóvenes es que se caracteriza por ser una respuesta rápida, las recompensas inmediatas, la interactividad y las múltiples ventanas con diferentes actividades. El uso es positivo, claro, siempre que no se dejen de lado el resto de las actividades propias de una vida normal como estudiar, hacer deporte, ir al cine, salir con los amigos o relacionarse con la familia.

Según un estudio realizado por la firma ComScore, el alcance del social media entre los colombianos (entendido como el sector que comprende redes sociales, blogs y demás espacios de interacción digital) es de 83,8%. Esta cifra ubica a Colombia como el quinto país de la región con el mayor alcance, detrás de países como Perú, que lidera el listado con más relevancia en la categoría de social media con 93,2%; seguidamente está Brasil, con 89,1%; México, con 87,8%; y Argentina, con 83,2%.

We are Social y HootSuite publicaron el digital 2020 Glover Overview Report en donde se evidencia que, en Colombia, la población total está conformada por 50,61 millones de personas, de las cuales el 81% está residenciada en zonas urbanizadas. 

El número de usuarios conectados a internet es de 35 millones, es decir, el 69% de la población total tiene acceso a este servicio. Paralelamente, la misma cantidad de personas son usuarios activos en redes sociales. 

Ahora, en un año, es decir, del 2019 al 2020, el número de usuarios de Internet aumentó en un 2.9%, lo que representa más de un millón de nuevos usuarios del servicio. Mientras que, el número de usuarios conectados a redes sociales aumentó en un 11%, es decir, para este año se crearon 3.4 millones nuevos perfiles. Para lo que los usuarios de internet entre 16 a 64 años Youtube es la plataforma social más usada con un (98%). Seguidamente de Facebook (95%), WhastApp (93%), Instagram (77%), Messenger (73%), y Twitter (55%).

Según un estudio realizado por Cifras y Conceptos S.A. en Colombia durante la cuarentena el nivel de ansiedad en las personas tiene un 51% clasificado como alto. La muestra se tomó de las principales ciudades, como también de las zonas rurales del país. Además se identificaron sensaciones por la que las personas han experimentado, por ejemplo, el estar inquieto, se identificó con un 55% contra un 48% de angustia. Los niveles de depresión también fueron obtenidos a lo cual se le asignó,según respuestas de la población encuestada, un 17% en general. Por lo que la cuarentena no ha sido un factor disparador de este tipo de diagnósticos psicológicos.

Después de oír el panorama del país frente a esta problemática de sanidad pública, es momento de conocer una de las voces que ha atravesado sensaciones de depresión. Esta joven estudiante de Nutrición y dietética, quien pidió que se reservara su identidad, narra desde su experiencia la manera en que las redes sociales le fueron conduciendo a experimentar trastornos depresivos.

En el caso de Santander, el panorama no parece ser muy diferente del nacional. Las cifras arrojan grandes índices de manipulación compulsiva de estas plataformas digitales, y además, preocupantes datos sobre el estado mental de los habitantes.

Teniendo en cuenta que el uso excesivo de las redes sociales es considerado como un problema real de sanidad pública según la organización mundial de la salud es pertinente dar a conocer las cifras referentes al consumo de estos medios y la penetración que ha tenido el internet a nivel regional.

 Es que, según El Boletín Trimestral de las TIC, de abril de 2020, cerca de 15 personas, por cada 100 habitantes cuentan con acceso fijo a internet en Santander.

Esta información es ampliada por el boletín técnico del DANE, emitido en el año 2019, en donde se afirmaba que el 80,6% de las personas encuestadas, usaba el internet para acceder a las redes sociales. 

El hecho de que existan tantas personas con acceso a internet, debe ser considerado como un índice de progreso en la región.  Sin embargo, Con el uso de estos medios, llegan las prevenciones respecto a lo que podría traer el abuso de estos. Pues como lo han demostrado investigaciones como la realizada por la escuela de psicología de la Universidad Central de Venezuela, las personas con excesos en el uso de las redes sociales presentan niveles más bajos de autoestima. 

Teniendo en cuenta esta relación entre adicción a las redes sociales y problemas en la salud mental, es apropiado destacar las cifras emitidas por El Consejo Nacional de Política Económica y social CONPES, que arrojan que, durante el 2018, en Santander la tasa de atenciones por trastornos mentales y del comportamiento fue de 2592 por cada 100.000 personas.

 Estos datos permiten conocer la magnitud del fenómeno en la región, y más si se tiene en cuenta las consecuencias más comunes que podrían traer estos tipos de trastornos, tales como el consumo desmedido de alcohol o sustancias psicoactivas, que, según las cifras del estudio mencionado anteriormente del CONPES, en el 2018 la tasa de atenciones por trastornos de consumo de sustancias psicoactivas fue de 138 cada 100.000 habitantes.  

Otra de las consecuencias conocidas de este tipo de afecciones en el estado de ánimo, está relacionada con la deserción estudiantil, pues como lo afirma el programa ‘Bucaramanga Metropolitana Cómo Vamos’ tanto en la capital santandereana, como en Floridablanca y Girón, la tasa de deserción escolar en casi todos los niveles educativos pasó del 2 % en el 2015, al 4 % en el 2018. Finalmente, como la consecuencia más fatal de los problemas de salud mental, se encuentra el suicidio, que como se evidencia en los boletines estadísticos mensuales de Medicina Legal y Ciencias Forenses, de enero a abril del 2020 se han reportado 5 suicidios en Bucaramanga, cifra que podría ser aún más alarmante, si se tiene en cuenta el informe del Observatorio Nacional de Salud Mental, donde destaca que en el 2018, la tasa de intento de suicidio por 100.000 habitantes en Santander fue de 50,8, mientras que en Bucaramanga se obtuvo una tasa de 60,5, con un total de 320 casos de tentativas de suicidio.

Finalmente, conocemos el testimonio de un joven estudiante, que narra la forma en que lo han afectado los episodios depresivos que ha experimentado, y la manera en que las redes sociales han influido en su autopercepción.

Desde la Psicología y diferentes estudios del comportamiento, se ha identificado ciertas consecuencias que podría traer el abuso de las redes sociales, en la autoestima, generando en algunos casos conductas de aislamiento, y sensaciones de frustración, depresión y vacío interno.

Este es el caso de Deyver Duván Acuña, estudiante de octavo semestre de Psicología, quien manifiesta haber pasado por episodios depresivos desde el momento en que ingresó a la universidad, y a medida que la presión aumentaba, estos episodios aparecían con mayor frecuencia. Él comenta cómo las redes sociales se fueron convirtiendo en parte importante en la construcción de su identidad, y fueron modificando aspectos relevantes de su comportamiento.

Acuña destaca cómo estos estilos de vida, conocidos a través de las redes sociales, fueron afectando la forma en que se percibía a él mismo.

Finalmente, da a conocer la manera en que estos episodios depresivos se manifiestan, y cómo estos han afectado sus relaciones sociales y su desempeño académico.

Esta perspectiva sirve para repensar la forma en que se están consumiendo las redes sociales, y buscar que estas puedan ser disfrutadas y aprovechadas sin que se conviertan en un factor de riesgo para los jóvenes.

Hemos llegado al final de este informe, donde buscamos exponer la relación existente entre el abuso de las redes sociales y algunos problemas de salud mental, teniendo en cuenta la repercusión que ha traído esta problemática para los jóvenes santandereanos.

Informaron Ana Milena Flórez, Simón Perico y Jesús Núñez Unab Radio.