Las manos que tejen sueños

Por Lunay Militza Figueroa Zambrano
lfigueroa363@unab.edu.co
Estudiante de Música

En las calles que recorremos diariamente por la ciudad, solemos ver arte ancestral, aquel que por medio de manos artesanas realizan pulseras, collares, bolsos, aretes, etc. Este oficio, que para muchos de ellos fue heredado, ha sido el sustento de todos los días y una manera de expresarse tanto artísticamente como espiritual, pues en cada tejido plasman su origen, su cotidianidad y su esencia, es claro, que una parte de ellos queda ahí.

La artesana Nayla mostrando el proceso de elaboración de una manilla con un dije de 
San Benito para una cliente. / FOTO LUNAY MILITZA FIGUEROA

En Colombia, las artesanías han sido símbolo de patrimonio cultural y es que el arte de tejer con materiales que nos brinda la naturaleza, como el bambú, las conchas, semillas, coco, lana y hasta escamas de pescado, ha sido originada por tribus y que actualmente nos envuelven de diversidad, ya que cada producto tiene la particularidad de variar dependiendo del contexto social, el clima, los recursos, donde se realiza y las manos del artesano.

Hoy en día ser artesanos no es tarea fácil, la gran mayoría vende en las calles donde están expuestos a muchos factores como al sol y la lluvia y en donde sus productos pueden sufrir gran cantidad daños, tampoco tienen un apoyo del gobierno pues muchos de ellos son brutalmente desalojados de sus puestos, además que su trabajo no ha tenido un buen valor a los ojos del cliente ya que muchas personas menosprecian el trabajo realizado a mano, ya sea porque lo ven como manualidades que cualquiera puede hacer o porque nos son productos industrializados.