¿Vándalos que protestan o violencia de Estado?

La protesta social es reconocida como un derecho en el artículo 37 de la Constitución Política de Colombia, donde dice que “toda parte del pueblo puede reunirse y manifestarse pública y pacíficamente”. Sin embargo, movimientos como el del Paro Nacional del 21 de noviembre del año pasado terminan con cifras desalentadoras para los defensores de este derecho: tres muertos y 250 heridos oficialmente.

Para la universitaria y manifestante, Nathalia Gualteros, estos números obedecen al comportamiento recíproco frente a los hechos violentos, así como a la falta de tolerancia entre ciudadanos.

“He notado la violencia, no solamente en lo que se hace sino también en lo que se dice, en las arengas que son ofensivas”.

Por otro lado, el estudiante universitario, Juan Oviedo, opina que la violencia en las manifestaciones existe porque existe un claro abuso de autoridad por parte de la policía.

“Deciden darle bolillo, incluso bala, como hemos visto en los acontecimientos recientes”.

Es evidente la provocación ejercida por parte de la fuerza policial en protestas pacíficas, incluso al punto de infiltrar las marchas con agentes vestidos de civil y armas de fuego.

Estos datos son corroborados por la misma Policía en informes como el que se conoció a mediados de este año, donde se muestra que hasta el 6 de julio de 2020 se abrieron 3 mil 674 investigaciones, de las cuales 1.474 son por presunto abuso policial.

Por su parte, los altos mandos de la fuerza pública niegan abusar del poder constitucional que poseen y, por el contrario, piden respaldo y respeto del pueblo. Así lo afirmó el excomandante de Policía de Bogotá, Hoover Penilla, en su declaración el pasado 14 de septiembre.

Por dios, los policías no necesitamos que alguien nos ordene para hacer uso de las armas o de los elementos de servicio. Nosotros analizamos las circunstancias y de acuerdo a ello actuamos y respondemos individualmente.

Los organizadores de manifestaciones sociales en Bucaramanga, por su parte, se niegan a hablar con los medios por temor a represalias por parte del Estado. 

Otra fuerza social latente es la de los maestros, quienes continuamente convocan a la ciudadanía y a los integrantes de sus sindicatos a marchar contra la negligencia del Gobierno nacional frente a las diversas exigencias de este sector.

El presidente de la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación, Fecode, Nelson Alarcón, afirma que el mismo Estado, a través de la fuerza pública, provoca a los docentes y estudiantes que protestan con el fin de estigmatizarlos a ellos y su lucha.

“Nosotros denunciamos, con pruebas, con los videos correspondientes. Por eso nosotros rechazamos esas provocaciones que la misma institución genera. Siempre seguiremos movilizándonos pacíficamente como corresponde”.

Pero, ¿por qué se producen hechos violentos en manifestaciones incluso pacíficas? El psicólogo Oscar Salcedo explica que los sentimientos de ira e indignación por parte de quienes protestan, sumado a la represión del Estado, suelen ser la principal causa de este comportamiento.

“La gente sale a manifestarse porque está indignada, porque ya no soporta más las inequidades, desigualdades, desequilibrios de poder en contra de ellos, en contra de las comunidades, de los ideales de progreso del colectivo, y si se encuentra, aparte de eso, con un aparato represor, van a haber respuestas agresivas. La agresividad en las manifestaciones inicia principalmente por la violencia de Estado”.

Otra de las consecuencias de estos actos violentos en medio de las manifestaciones es el daño en bien ajeno, tipificado como delito según el código penal y evidenciado mediante vidrios rotos, estaciones de bus dañadas e incluso saqueos de negocios locales. Estos hechos han ocasionado que una gran parte de la población se oponga a las marchas.

Por otro lado, hay ciudadanos que ven en las manifestaciones una lucha digna, y apoyan a quienes salen a las calles.

 Las dos manifestaciones más recientes en la ciudad, la caravana por Santurbán y la protesta por el abuso policial, fueron comparadas entre sí, debido a los hechos de violencia que opacaron el objetivo de esta última, donde terminaron enfrentándose los manifestantes y la policía, y 21 personas resultaron heridas. 

Informó Andrés Leon, Unab Radio.