Rompiendo fronteras por un amor de internet

Por: Michael García, estudiante de Periodismo.

Debido a la inestabilidad del país y la falta de oportunidades en Argentina, obligó a proyectarse una vida lejos de su casa natal a Pablo Ariel Bouny, pero sólo bastó un romance por redes sociales para que éste argentino decidiera emigrar a Colombia sin pensar en una fecha de regreso.

Esta es la travesía de Pablo Bouny, un argentino apasionado por las motos y la música, que por amor a ciegas decidió emprender su viaje a Colombia para poder conocer a su pareja de larga distancia, esta fue la principal razón que lo ayudó a tomar la decisión de emigrar a Colombia. “Siempre quise salir, conocer un poco cómo era la vida en otros países, conocer otras culturas, también por la inestabilidad del país… empecé a buscar y conocí una persona en Colombia, la que actualmente es mi esposa, así qué mi opción fue de una Colombia. Así que hace 10 años llegué acá al país, estuvimos un año viviendo acá, me casé en Colombia; luego nos devolvimos para Argentina un par de años, y ahora, ya hace 3 años que estoy acá en Colombia”.

Un poco tímido por la grabadora que apuntaba a su boca y con un tono de voz que delataba sus nervios al momento de hablar sobre su vida, siguió con la historia de toda esa travesía que tuvo en el viaje rumbo a Colombia. El impulso por salir de su país, sin conocer muy bien el lugar al que se dirigía y peor aún, nunca antes había salido de viaje a otro sitio lejano de donde él estaba, éste argentino emprendió su primer viaje sin pensar en regresar al lugar que lo vio nacer. “Yo siempre había tenido ganas de irme de Argentina, así que… en un momento, de un día para el otro decidí venirme para acá, compré un tiquete aéreo de una, incluso, yo nunca había salido del país, ni siquiera tenía pasaporte; así que compré el tiquete y tramité el pasaporte, bueno… fue como una cosa medio sin pensarlo, sin planearlo mucho. La verdad no conocía nada de Colombia, sólo lo que se ve en televisión o por noticias”.

Al momento de hablar sobre Colombia y qué cosas sabía de este país, se quedó pensando un rato mientras miraba al techo de la fábrica en la que él se encontraba. Sin embargo, al instante reaccionó como si hubiera encontrado la información en lo más profundo de su memoria. “De Colombia… uno se imagina lo que ve en películas gringas, o sea que es selva, narcotráfico, que todo el mundo está jugando al futbol y es algo muy equivocado. Yo cuando llegué conocí a Colombia, primero pensé que en Bogotá hacía calor, y nada que ver… Bogotá es fría; y Bogotá no es una selva como muestran en las películas, es un mar de cemento… llegando a Bucaramanga también, uno empieza a ver que son ciudades que tecnológicamente están bastante avanzadas, incluso, me atrevo a decir que en tecnología están más avanzados que Argentina”.

Después de hablar sobre Colombia y temas relacionados con éste país, me surgió el interés por saber cómo era vivir en Argentina, al momento de preguntar esto, noté en el rostro de Pablo una expresión que me quería decir en pocas palabras que no había mucho por decir. “Es un poco complicado la parte económica del país, digamos… son muy cambiantes, hay gobiernos muy extremistas. Yo vivía en el interior de Argentina, en Rafaela, en la provincia de Santa Fe, es una ciudad pequeña, muy industrial en donde llegaron muchos migrantes italianos, tiene una cultura un poco distinta al resto del país; digamos que vivir en Argentina… a ver, cómo lo puedo explicar; estos últimos tiempos era como mucha incertidumbre”.

Tocándose el cabello y moviendo sus piernas de un lado al otro, pensé en preguntarle por algo de Colombia, debido a que su actitud cambiaba cuando hablaba sobre éste país, como si tuviera más conocimiento que el anterior lugar donde vivía. Sin más qué decir, le pregunté por algo que haya encontrado o notado de éste país. “Lo que me pareció como loco, que está bueno es que hay un cambio cultural de ciudad a otra, o sea, uno está en Santander y es un mundo totalmente distinto a lo que es la costa, de la costa distinto a lo que es Medellín; Medellín es muy distinto a lo que es Bogotá, hay mucha cultura gastronómica, los cambios de acentos que me parecen muy distintos de un lugar a otro, o sea, el paisa habla de una forma, el costeño habla de otra forma, lo primero me sonaba como raro, como si esa gente no fuera de Colombia y lo que pasa es que son paisas y en Medellín hablan así y me parece muy loco eso”.

Con una actitud más relajada y un poco sonriente por parte de Pablo, nuestra conversación se pone amena. Riendo de la respuesta que había dado anteriormente, hice otra pregunta relacionada con la anterior, ¿Qué le parece extraño de Colombia? “Lo que más raro me pareció de Colombia es que se festeja un segundo puesto… la selección queda de segunda y se hace una fiesta nacional; eso me pareció algo rarísimo, algo que nunca me imaginé. Para nosotros la selección queda en un segundo puesto y es un problema o los jugadores ya no sirven, acá sea segundo o tercero se festeja, por algo dicen que Colombia es el país más feliz del mundo”.

Al rato de reír un poco por la respuesta que Pablo había dado, le pregunté sobre qué hacía él para vivir actualmente, con un tono serio y de forma breve me respondió. “Actualmente para vivir, yo tengo una distribuidora de alimentos y también tengo acciones en una fábrica de productos alimenticios”.

Luego de responder rápidamente, miró el reloj y pensé en que debía finalizar la entrevista, para mi suerte sólo faltaba hacerle dos preguntas más. Para terminar de romper el hielo con el argentino y hacer que se sienta cómodo al hablar conmigo de algún tema, le pregunté por sus pasatiempos, porque sabía que a muchos les gusta hablar sobre las cosas que hacen o solían hacer. “Los hobbies de toda la vida siempre fue la música y las motos, siempre me gustó el enduro y el motocross, pero bueno… eso quedó en el pasado cuando tenía 20-25 años, ya hace rato. De los hobbies que más disfruto o el que sigo manteniendo desde la infancia es la música, yo había estudiado teclado, después empecé a tocar la batería y empecé a conocer bandas de punk como: 2 minutos, Ramones, Violadores, Attaque 77… en Argentina tenemos mucha movida con el punk rock, y es un hobbie que hasta el día de hoy lo tengo”.

Sin saber que esta sería la última pregunta que le haría, Pablo trataba de mantener una buena actitud en la entrevista, aunque su rostro denotara lo contrario, sabía que el tiempo era limitado y que él debía seguir con su trabajo, así qué le pregunté ¿Qué planes tiene de quedarse? “Con los proyectos que tengo iniciados acá, la verdad no tengo planeado devolverme para Argentina, como te decía, me gustó Colombia y ya como empecé mi vida acá desde cero… así que mis planes son quedarme en Colombia; tengo mis proyectos laborales, tengo un proyecto musical, soy músico y estoy tocando en una banda, ya hay par de proyectos serios, así que… la idea es quedarme en Colombia, pienso formar una familia y quedarme acá para toda la vida”.

Para muchos es una ilusión poder salir de Colombia y cumplir el sueño de vivir en otra parte muy lejos de este país, la razón más común de algunas personas es que acá no hay manera de progresar, pero, para otras como Pablo “el argentino baterista” como lo conocen algunas personas de Bucaramanga, haber llegado a este país fue lo mejor que le pudo pasar en lo que lleva de vida, y así mismo, expresa que, al pasar los días, cada vez más se enamora de esta linda tierra como él dice.